Cualquier paciente crónico desarrolla una relación especial con su médico. No sólo porque le ves muchas más veces que un paciente “normal” sino también porque, en mayor medida, sientes que dependes de él o ella y eso puede ser muy jodido si la relación no termina de funcionar. Sin embargo, cuando das con un buen profesional (en mi caso las dos doctoras que me han tratado durante periodos de tiempo más prolongados) tienes una tranquilidad enorme. Hay que tener en cuenta que a los “retrones” del Crohn normalmente nos tratan en el hospital los especialistas de digestivo (o de unidades especializadas en Inflamatorias Intestinales, que las hay) y que, con el diseño actual de la atención sanitaria en la Comunidad de Madrid, tu médico de familia tenderá a verte sólo cuando te cambien el tratamiento o cuando, como cualquier otra cartilla, te resfríes o se inflame el oído. Por eso,...