Y al ritmo de un tango se escaparon los besos y con cada paso aprendido se escribía un te quiero. Son amores fugaces que llenan los huecos y prenden sonrisas donde faltan los hechos. No hay futuro posible, ni siquiera en un sueño, pero son encuentros que vivirán en mi recuerdo. Una isla, un mar, un avión o un metro, se que no volverás pero me aferro al deseo. Si fuera real no sería tan bello, por eso huí cuando aún era cierto. Cuando necesite volar, amor, me agarraré a estas alas que sin querer me diste para que al pensarte escapara y no quisiera volver adonde una vez fuiste. E.C.F. Entrada publicada en San Valentín, por la misteriosa E.C.F, invitada del autor del blog. El que haya huido de ella que se arrepienta inmediatamente, pues a un servidor no se le ocurre tontería mayor en este...