A mi me diagnosticaron la enfermedad cuando tenía sólo 21 añitos, de eso hace ya más de 16. Contrariamente a lo que dice la estadística, a mi la enfermedad me la diagnosticaron metiéndome un tubo muy largo por la boca, después de que mi médico de cabecera sospechase que podía tener unas úlceras de duodeno (Yo tenía la certeza de que tenía algo roto en algún punto de mi abdomen porque me dolía horrores justo antes y después de comer y mi médico fue el que convirtió mi certeza –me duele– en una sospecha clínica: lo de las úlceras y el duodeno) Yo en aquella época dependía de la cobertura santiaria de mi padre y él era funcionario de Muface así que conseguir hora para la endoscopia fue relativamente fácil y la endoscopia… Bueno, ya dedicaré un episodio a los placeres de las endoscopias superior e inferior pero puedo adelantar sin temor a equivocarme que la obsesión que tenemos los...